Todos nos alegramos, por ver aumentar el número de los que se acercan a recibir al mismo Jesús bajo la sagrada forma.
Necesariamente el encuentro con Cristo Eucaristía es una experiencia personal e íntima, y que supone el encuentro pleno de dos que se aman. Es por tanto imposible generalizar acerca de ellos. Porque sólo Dios conoce los corazones de los hombres. Sin embargo sí debemos traslucir en nuestra vida, la trascendencia del encuentro íntimo con el Amor. Resulta lógico pensar que quien recibe esta Gracia, está en mayor capacidad de amar y de servir al hermano y que además alimentado con el Pan de Vida debe estar más fortalecido para enfrentar las pruebas, para encarar el sufrimiento, para contagiar su fe y su esperanza. En fin para llevar a feliz término la misión, la vocación, que el Señor le otorgue.
Pero pidamos por aquellos que no creen en que en un trozo de pan se encuentra el Amor de los Amores. Se han dado casos de recibir al Señor y sacarlo de la boca al darse la vuelta. Por ello, el párroco ha pedido y recordado en las celebraciones de este fin de semana el recibir al Señor delante de él.
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