8 de junio de 2013

Custodia de San Miguel de Abona

   Es el Papa Eugenio IV quien ordena que se hiciesen procesiones con el Santísimo Sacramento (año 1443). Aunque aquellas primeras procesiones, no eran como las de hoy. En aquella época se empleaba el copón o el cáliz con la forma consagrada sobre éste. Esta circunstancia da lugar a la custodia.

   La custodia de la parroquia de San Miguel Arcángel, de la cual existen incógnitas sobre su encargo y presencia en la fabrica parroquial (pieza remitida desde México pero debido a un vacío documental no nos permite contrastar su adquisición)
es una pieza realizada en plata sobredorada y atiende al modelo denominado de sol, pues que el viril aparece rodeado de rayos rectos terminando en estrellas intercalados por rayos flameados con motivos vegetales. Se decora además con piedra semipreciosas (granates y aguamarina), insertadas en el viril y el sol mediante cabujones. El astil está compuesto por cuerpos y jarrones superpuestos con asas fundidas. Y, el pies, es circular con decoración vegetal y cabezas de querubines. Si su procedencia, historia, estética artística y materiales, ya la hacen una obra meritoria, no menos méritos tiene las técnicas empleadas en su ejecución. Desde su dorado al mercurio al torneado, fundido, cincelado, repujado, relevado y gravado.

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